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Conservar pasteles en casa

¿A quién no le ha sucedido que, después de una comida familiar o con amigos, le sobran pasteles o tarta del postre? Pues vamos a darte algunos consejos para que los guardes correctamente.

Lo mejor para los productos de pastelería es, sin duda, que te los comas en el mismo día que los compras o que los haces. ¡Un buen pastel nunca va a estar igual que el primer día! Sin embargo, normalmente esto es muy complicado.

Lo primero que hay que tener en cuenta es que hay muchos tipos de productos y no todos se podrían conservar igual.

Conservar a temperatura ambiente

Hay ciertos pasteles que podemos conservarlos sin problema a temperatura ambiente. Eso sí, siempre teniendo en cuenta que no haya una temperatura muy elevada.

Este sería el caso de los bizcochos. Lo mejor para evitar que se resequen sería guardarlos en un envoltorio hermético y así podríamos tenerlos hasta una semana.

En caso de estar glaseado, la cobertura actúa igual que el plástico, es decir, evitan que se reseque el pastel. Hay que protegerlo del polvo con un tazón volteado o un cubrepasteles y guardar a temperatura ambiente.

Si el bizcocho estuviera empezado habría que proteger esa zona con papel film con cuidado de que no se pegue el glaseado.

Hay que tener cuidado con los bizcochos con coberturas lácteas o con frutas, ya que lo mejor en este caso sería refrigerarlos.

Refrigeración

Si el pastel lleva algún tipo de buttercream podría mantenerse en el frigorífico unos tres o cuatro días. Sin embargo, si lleva crema, queso crema o fruta fresca, no habría que mantenerlos más de dos días.

Se pueden refrigerar pasteles de hojaldre, aunque es inevitable que este se humedezca y que no vaya a crujir como lo haría recién hecho. El merengue o la nata tampoco conservaría la misma textura y tendería a solidificarse un poco. Sin embargo el sabor no cambiará en absoluto.

Congelación

Los pasteles congelados se conservan hasta 4 meses en buenas condiciones.

Para pasteles que ya están cubiertos, envuélvelos en papel de plástico y colócalos en una bolsa hermética resellable. Esto evitará que absorban los otros sabores del refrigerador.

Sin embargo, no es recomendable congelar pasteles con merengue o coberturas de crema, ya que se pueden descomponer.

 

En conclusión, tal como hemos dicho al principio, lo mejor es que no tardes mucho en disfrutar de los pasteles. Hay que tener en cuenta que las confiterías tradicionales, como Ovetus, elaboran todos sus pasteles artesanalmente y por lo tanto no llevan los conservantes típicos de los productos industriales.

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