En este artículo vamos a hablarte del buttercream y te decimos cómo hacerlo. Recuerda que en nuestro blog te traemos artículos semanales con ideas y consejos para que te conviertas en un experto en repostería.

Sí, como estás leyendo, en nuestro blog tenemos multitud de artículos sobre repostería para que seas quien más sabe de este oficio. En Confitería Ovetus llevamos casi 30 años siendo expertos en esta materia, y cada día salen de nuestro obrador productos que vendemos en nuestras tres tiendas físicas en Oviedo (Asturias) y online. Puedes visitar la tienda online pulsando sobre estas líneas. Además, hacemos envíos a donde nos digas así que no tienes excusa para probar nuestros productos.

Ahora sí, vamos a comenzar con el artículo. ¡Coge papel y boli!

¿Qué es el buttercream?

Como su nombre indica es una crema de mantequilla. Para ser más exactos, una crema de mantequilla batida con azúcar. Tiene su origen en los países anglosajones a raíz de las tartas y cupcakes. Bien es cierto que, con la llegada a España, se ha ido adaptando la receta a nuestras costumbres y productos.

¿Cómo se hace el buttercream?

Te daremos los ingredientes y cantidades, pero antes queremos hacer una apreciación. Si no quieres que quede excesivamente dulce, utiliza la misma cantidad de azúcar en polvo y mantequilla. En épocas de calor, para que la masa aguante mejor, sería recomendable subir la cantidad de azúcar en polvo entre 75 y 100 gramos.

El último apunte antes de ir con el paso a paso, es que necesitas una batidora de varillas, ya que hará que la masa quede más consistente.

Ingredientes para unos 12 cupcakes:

• 250 gramos de mantequilla. Debe ser mantequilla sin sal y debes mantenerla a temperatura ambiente.
• 250 gramos de azúcar en polvo. También valdría azúcar glas.
• 4 cuchadas de leche.

Elaboración:

• Primero debes tamizar el azúcar en polvo.
• Agrega la mantequilla a temperatura ambiente y la leche.
• Bate todo a velocidad baja hasta que se integre todo completamente.
• Ahora toca batir durante unos 5 minutos a máxima velocidad. La textura final del buttercream debe ser similar a la que tendría un helado.
• Ya tenemos la base del buttercream, es buen momento o de dejarlo así o de añadirle sabor, por ejemplo, con chocolate, con aroma, con frutas o con lo que se te ocurra. Haz volar tu imaginación.

¿Qué te ha parecido el artículo? Te esperamos en nuestras tiendas físicas de Oviedo y en nuestra tienda online.