Hay muchas historias que relatan el origen del bombón, ese pequeño gran manjar, pero la más conocida por todos es la del Rey Luis XIV. Se dice que su pastelero le ofreció unas pequeñas frutas bañadas de chocolate.

Cuando las probó, el monarca respondió: «bon, bon», afirmando así su aprobación. De ese «bon bon» (en francés, bueno bueno) surgió el término bombón, tal y como lo conocemos hoy.

Desde que el Rey Sol bautizó accidentalmente a todo tipo de chocolate relleno como bombón, este fue ganando popularidad. Aunque no fue hasta principios del siglo XX cuando empezaron a adquirir fama, gracias a la aparición del producto en el mercado estadounidense.

Hay otras historias que apuntan a que un cocinero de la Infanta Mª Teresa, la primera esposa del Rey Sol, fue el que innovó poniendo el chocolate líquido en un molde y enfriándolo.

Más tarde, fueron los artesanos belgas, suizos, italianos y franceses, los que perfeccionaron la elaboración de este dulce. Sin embargo, no fue hasta 1868 cuando la marca Cadbury sacó la primera caja de bombones.

Sea como fuera, todos estaremos de acuerdo en que habría que hacerles un monumento a todos los que se les ocurrió elaborar un producto tan exquisito con un ingrediente tan básico como es el chocolate, convirtiéndolo en el producto premium de chocolate por excelencia.

En Confitería Ovetus llevamos más de dos décadas elaborando bombones artesanales. En nuestra tienda online (https://tienda.confiteriaovetus.com/c/bomboneria) podrás encontrar una amplia selección de bombones artesanos elaborados con las mejores materias primas.

Ahora, lo difícil es decidirse por uno de ellos ¿Cuál es tu preferido? ¿Serías capaz de elegir sólo uno?